La Comisión de Salud del Congreso de la República aprobó el proyecto de Ley 275/2016-CR, que declara de interés público el medicamento Atazanavir, este sería un paso previo, que de contar con el voto favorable del pleno del Congreso, daría luz verde al uso de la licencia obligatoria, reduciendo el excesivo precio que paga el Estado Peruano por dicho medicamento. Esta situación, acontece en un escenario en que el atazanavir estaría por agotarse, según el Ministerio de Salud, solo se cuenta con stock hasta junio de 2017, por ello, en el mes de abril CENARES inicio el estudio de mercado, paso previo para la compra de 757,800 tabletas (750 mil para MINSA Y 7,800 para SALUPOL) y que representaría un gasto de aproximadamente S/.14 millones.
Ante esta situación, el mensaje del Legislativo es claro, no podemos continuar sometiéndonos a los intereses de una farmacéutica pagándole por tableta de atazanavir S/.18.76, cuanto en el mercado internacional el precio de la versión genérica es S/ 1.40 y, los recursos para garantizar la sostenibilidad financiera del sistema de salud, es limitado.
Queda claro que tenemos que buscar otras alternativas exitosas, y dejar a tras el desentendimiento o la invención de obstáculos que han llevado en los últimos cuatro años a pagar un sobregasto de S/.75 millones a la farmacéutica Bristol Myers Squibb, único proveedor en el mercado peruano hasta el 2019. Recordar que en el 2015, el gobierno de Brasil nos donó una importante cantidad de atazanavir, mecanismo que deberíamos intentar nuevamente; recurrir al Fondo Global, que ha colocado atazanavir en 11 países a un precio promedio de $0.65 la tableta, o a la OPS, que a través de un novedoso mecanismo pueda resultar exitoso, donaciones y compensaciones diferenciadas que lleven al equilibrio, sería una propuesta ingeniosa, en fin; vergonzoso seria, que luego del mensaje de la Comisión de Salud, nos atrevamos a pagar 13 veces más, por puro capricho.