Hacia dónde va el tratado internacional vinculante negociado en la OMS contra futuras pandemias

Por Germán Velásquez

La idea de un tratado internacional sobre pandemias es evitar que se repitan los fracasos ocurridos durante la crisis del COVID-19. Muchas cosas no funcionaron, pero el fracaso más flagrante fue la distribución desigual y el acceso desigual a vacunas, diagnósticos y tratamientos. Se necesita un tratado internacional basado en los principios de equidad, inclusión y transparencia para garantizar el acceso universal y equitativo.

El actual proyecto de texto del “tratado sobre pandemia” está lejos de responder adecuadamente a los problemas enfrentados durante la crisis del COVID-19. Los países desarrollados han debilitado la versión inicial del borrador y el texto ahora está lleno de matices innecesarios. La expresión “cuando proceda” y otras expresiones similares, típicas de las disposiciones voluntarias, aparecen ahora repetidamente. Se trata de proteger y garantizar el interés público y la salud de los ciudadanos como un derecho, o de defender los intereses de una industria que busca enriquecerse sin límites.

El tratado contra futuras pandemias será uno de los temas centrales de la próxima Asamblea Mundial de la Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en mayo de 2024. Si los países del Sur, que representan la mayoría de los miembros de la OMS, se unen con un claro y una visión sólida de la salud pública y los países del Norte actúan con lucidez, siguen la evidencia científica y al mismo tiempo buscan la seguridad para todos, el tratado contribuirá al bienestar de las generaciones futuras. Si al final un pequeño grupo de países se opone a un tratado con disposiciones significativas, no debemos olvidar que la OMS es una institución democrática donde existe la posibilidad de votar.

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