La primera vacuna española contra el coronavirus, Hipra, está cerca de empezar a comercializarse. La compañía española de la que recibe el nombre esta vacuna (HIPRA) sigue esperando la autorización por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y ha anunciado que su salida al mercado está prevista para setiembre del presente año, coincidiendo con el inicio de la administración de la cuarta dosis en personas mayores de 80 años en España.
Hipra está diseñada “para usarse como refuerzo en personas que han recibido un ciclo completo de vacunación primaria”, según recoge la EMA[1]. La vacuna española de Hipra “está basada en dos proteínas recombinantes estructuralmente similares, una correspondiente a la variante alfa y otra a la variante beta, que se unen formando una estructura única llamada dímero, y que está acompañada de un adyuvante que incrementa la respuesta inmunológica.”[2]
De acuerdo a medios españoles, los resultados de los ensayos clínicos realizados hasta ahora, demuestran que Hipra presenta efectos secundarios parecidos a las otras vacunas aprobadas por la EMA. Entre ellos está el dolor en el punto de la inyección, dolor de cabeza, cansancio y malestar. En cualquier caso, según los expertos, los síntomas mencionados desaparecerán al cabo de dos o tres días, al igual que los de las otras vacunas.
Así mismo, los ensayos también han dejado evidencia de la eficiencia de esta nueva dosis, que provocaba un aumento en el número de anticuerpos contra el virus dos semanas después de su administración en pacientes con dos dosis de Pfizer. En el mismo plazo de tiempo después de administrarse Hipra, también se observó un incremento de anticuerpos contra las variantes BA.4 y BA.5 de ómicron en pacientes que habían recibido una dosis de Moderna.
[1] https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20220329/primer-examen-ema-vacuna-espanola-13447577
[2] https://www.ondacero.es/noticias/sociedad/estos-son-efectos-secundarios-hipra-vacuna-espanola-covid_2022073062e4f93a47c454000102ed40.html